¿Existe la posibilidad legal de tener tres padres?
Con las nuevas definiciones de familia, que cada vez se vuelven más populares y diversas, emergen una nueva serie de preguntas que deben buscar respuestas no solo entre los individuos, sino también entre quienes son los encargados de redactar las leyes y tienen la responsabilidad de representar todos los sectores de la sociedad con el fin entablar una discusión seria cobre un tema que concierne cada vez a más personas.
Hoy por hoy, se han vuelto más populares las discusiones que conciernen a los padres que corren el riesgo de perder la potestad de sus hijos por vivir relaciones poli-amorosas y los problemas legales que enfrentan algunos padres del mismo sexo y que son parte de la población clasificada como “minorías sexuales”. Si bien es un tema que aún está dando sus primeros pasos, nuestra intención aquí es dar un pequeño panorama del terreno legal actual, de lo que está en juego y de las formas mediante las cuales podemos crear consciencia sobre estas problemáticas que, como sociedad, necesitamos abordar.
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La familia nuclear
Tradicionalmente las cortes en gran parte del mundo se han basado sobre el concepto de dos padres como tutores legales. Concretamente la mujer que da a luz al niño y su esposo al momento del nacimiento. Incluso en escenarios como la adopción y paternidad informal esta tendencia se mantiene de forma sistemática. Y no es nada que sea de impresionar, pues para las generaciones anteriores tal lógica funcionaba bien, pues eran muy reducidos los casos en los que la familia tuviera estructuras alternativas como las que se ven cada vez más en la actualidad. Pero las sociedades actuales han impuesto estilos de vida más complejos en los cuales las dimensiones, profesionales, familiares y de relaciones interpersonales han evolucionado dando cabida a vacíos legales que demandan una transformación, pues no es la ley quien hace la sociedad, sino al contrario, son las leyes las que deben adaptarse a la sociedad. Por esta misma razón vemos en otros ámbitos actualizaciones, nuevas definiciones, jurisprudencia e incluso referendos para establecer nuevas reglas de juego que sean más justas y garanticen los derechos fundamentales de las personas, como ya ha sido el caso en los sectores de las tecnologías de información y el manejo de la privacidad y los datos personales.
Adicionalmente en los últimos 70 años una muchos países han visto una aumentación y una diversificación considerable en la oferta de ayudas reproductivas de carácter profesional. Si bien en un principio estuvieron concebidas para la misma lógica de dos padres, de forma anexa comenzaron a introducir nuevas complejidades técnicas a las cuales la ley no ha respondido claramente y donde quedan simplemente algunas decisiones emitidas por cortes que, históricamente, han permitido aumentar el número de padres legales de un niño. Sin embargo, no se ha adoptado de forma general y para llegar estos acuerdos, generalmente se debe pasar por un engorroso proceso legal para obtener una decisión por parte de la justicia.
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Paternidad múltiple
Como se mencionó en un principio, existen dos grupos principales que están movilizándose y visibilizando el tema: las minorías sexuales y quienes se han apoyado en técnicas de reproducción asistida para procrear. En los estados Unidos, Canadá y Holanda se ha autorizado la paternidad legal a más de dos personas en casos en los que se tiene el ovulo de un individuo, el esperma de otro y el vientre de un tercero. Dado que los tres han contribuido a la vida del niño, esta situación se ha constituido como uno de esos casos de excepción en los que la ley permite la legalidad de la existencia de tres padres. Otro ejemplo es el de Alaska, California, Massachusetts, Oregón y Washington, cinco estados que, en el 2012, aprobaron la adopción de un tercer padre.
Sin embargo, uno de los avances más importantes para el reconocimiento de la paternidad múltiple se dio en el 2013 cuando California pasó el proyecto de ley SB-274, el cual reconocía la posibilidad de que un niño tuviese tres o más padres legales. Sin embargo, la ley cuenta con la restricción que especifica la aplicación solo “…en el raro caso de que un niño tenga realmente más de dos padres, y la constatación de que un niño tiene más de dos padres es necesaria para protegerlo del detrimento de ser separado de uno de sus padres.”
Igualmente, en términos de custodia la ley implica algunas restricciones adicionales. Más recientemente, en el año 2017, un juez en Nueva york autorizó la custodia a tres padres sobre un mismo hijo, lo cual incluía a la madre no biológica del niño.
Estas acciones son testigo de que la ley es cada vez más abierta a escuchar las nuevas dinámicas sociales que se implantan y da cabida a nuevas concepciones de familia que antes eran vistas como excepciones. Si bien aún queda mucho camino por recorrer, es otra arista más de la lucha por los derechos que vienen de la mano con el matrimonio del mismo sexo que ha sido exitosamente reconocido legalmente en varios países del mundo.
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Lo que viene después
Si bien es una discusión que trata temas extremadamente sensibles para algunos, hay que tratar de no desviar la atención y mantener como hilo conductor el punto central de todo esto: proteger la seguridad legal y los mejores intereses del niño. Precisamente grupos que piensan que es una mala idea tener más de dos padres, como ciertos sectores políticos y religiosos con tendencias a ser más conservadores, pueden caer en el error de la descalificación o desviación de la atención hacia puntos de discusión que tengan que ver con temas menos relevantes al bienestar del niño como tal. Es capital el tener la vista fija sobre el objetivo real, debemos armarnos de argumentos, mantener la cabeza fría y estar dispuestos a saber argumentar de la forma más clara posible como los cambios pueden generar impactos positivos en las diferentes esferas que nos preocupan colectivamente como sociedad.
El hecho va más allá de ser una reivindicación de derechos del adulto, es crear un entorno de bienestar mediante la cual los tutores legales del niño puedan proveerle todo lo que necesita para su pleno desarrollo y crecimiento a través de un proyecto comunitario que se ha ido adaptando para responder mejor a los retos de la sociedad actual donde cada vez es más complejo (ya sea por coyunturas económicas o sociales) sostener el esquema tradicional de dos padres cohabitando en un techo común.
Más allá de esto, en un futuro no muy lejano, se podría incluso pensar en la popularización de métodos alternativos de reproducción que involucren tres personas como fue el caso de la transferencia mitocondrial en la cual el bebé carga genes de tres ADN diferentes y que implicarían que la ley cambie una de sus definiciones más básicas de familia de forma generalizada. Si bien este método solo ha sido declarado legal en el Reino Unido, el futuro abre las puertas a más y más novedosas posibilidades que nos permiten ver una luz de cambio. Más allá de esto es importante tener la mente abierta para poder entablar discusiones en torno a la ética de este tipo de prácticas, sus implicaciones sociales e incluso biológicas. Por eso mismo no se desanime, todo indica que esto, por ahora, es tan solo el comienzo.