Los problemas de fertilidad no son una cosa nueva, existen desde tiempos ancestrales y dependen de una enorme cantidad de factores que hasta hoy en día comenzamos a entender con la ayuda de la medicina moderna. Y es que resulta apenas lógico que el ser humano, cualquiera que sea su cultura, tras haber lidiado con estos temas durante siglos, haya desarrollado técnicas naturales para favorecer la fertilidad desde antes de la invención de la medicina moderna.

Estamos hablando de una situación que no distingue ni razas ni países. Cuando 1 de cada 7 parejas en el Reino Unido tiene las mismas dificultades que 1 de cada 4 en México comenzamos a evidenciar que se trata de un tema mundial. Basta con nombrar cualquier país para corroborarlo. Según las estadísticas, en los Estados Unidos, cerca del 9% de los hombres y el 11% de las mujeres ha experimentado problemas de fertilidad en algún punto de su vida. De la misma forma, del otro lado del Atlántico, en España, la situación parece ser ligeramente más grave ya que entre el 15 y el 17% de la población ha experimentado la misma situación.

Sumado a todo esto, al buscar soluciones viables, muchos se topan con un difícil acceso a los métodos de reproducción asistida disponibles o simplemente con la falta de disponibilidad de los mismos ya sea por el nivel de desarrollo económico de su país o por las eventuales limitaciones legales que su estado pueda implementar. A estos temas coyunturales se suman otros más que involucran costos, permisos, solicitudes, e incluso tribunales y de extensos periodos de tiempo que pueden desmotivar a más de uno. Pero no pierda la esperanza, siempre hay otra forma de ver las cosas y porque no, considerar soluciones que incluso a veces nos puedan parecer atípicas. Es en estos momentos cuando puede tener en cuenta la medicina alternativa y las terapias naturales orientadas a mejorar la fertilidad y lograr el embarazo.

Así mismo, estas técnicas pueden constituir una excelente opción para aquellas personas que no deseen utilizar medicamentos que puedan parecer agresivos para el organismo o también si desea apoyarse tanto en la medicina convencional como en la alternativa al mismo tiempo con el fin de poner todas las probabilidades a su favor.

¿Cuáles son las técnicas de la medicina alternativa?

Básicamente se trata de terapias naturales que apuntan a combatir la infertilidad mediante la conservación y la optimización de la capacidad de concepción. Pueden tener dos tipos de enfoque; el primero, consiste en potenciar y mejorar la fertilidad mediante la utilización de remedios naturales, mientras que el segundo que busca que exploremos nuestra propia fertilidad para poder identificar el momento ideal para lograr el embarazo.

Entre las técnicas más comunes se encuentran:

• La homeopatía: es un tipo de sistema médico alternativo que busca estimular la curación del organismo a través de la utilización de compuestos naturales y está orientado a tratar las causas de la enfermedad más que los síntomas. Se le alude la capacidad de curar al paciente tanto en el plano físico como emocional, lo que ciertamente contribuye en el caso de la infertilidad pues se dirige a la base del problema, la cual muchas veces no se tiene clara desde el principio. Compuestos a base de sepia (para la libido), sabina (en caso de abortos reiterados), aureum metallicum (para la endometriosis), medorrhinum (disfunción eréctil) y selenio (calidad de los espermatozoides) son los más comúnmente recetados.

• La fitoterapia: Consiste en el uso de plantas con fines medicinales curativos. Parte de la suposición de que cada una de las partes de la planta tiene una cualidad terapéutica. Se encuentran en distintos formatos como elixires, extractos, hidratados, aceites esenciales, comprimidos y cápsulas. Entre algunas de las plantas que se utilizan para mejorar la fertilidad se encuentran el pie de león (para el sistema hormonal y el útero), el ginseng asiático (para el conteo y la motilidad de los espermatozoides), la maca (mejora la fertilidad y la libido) y el dong quai (equilibra los niveles de estrógenos y aumenta las tasas de implantación del embrión). 

• La acupuntura: Esta técnica terapéutica de origen chino consiste en insertar y manipular agujas en puntos determinados del cuerpo para así restaurar y mejorar la salud general del organismo. Actualmente existen estudios que sugieren que su utilización conlleva a unas mejores tasas de éxito en la implantación del embrión en grupos de mujeres con problemas de fertilidad. Aparentemente esto se atribuye a que la acupuntura mejora la fluidez de la sangre en el útero, lo cual mejora las condiciones del endometrio a su vez.

• Dietética y nutrición: Como su mismo nombre lo indica, sirve para encontrar la dieta adecuada que debe seguir el paciente para mejorar su fertilidad teniendo en cuenta todos los aspectos que lo rodean o que interfieren en su vida (trabajo, enfermedades, edad, antecedentes familiares). La ventaja es que se puede también adaptar para cualquier otro tipo de objetivo personal que usted se haya fijado. Tan solo debe consultar con un experto e indicarle el objetivo particular de su consulta.

Poco a poco se van sumando algunas técnicas más en la lista de popularidad, por ejemplo:

• La oligoterapia
• Las sales de Schüssler o sales minerales terapéuticas
• La hidroterapia
• El quiromasaje
• El midfulness o “conciencia plena”
• La medicina tradicional china
• La refloxología podal
• La auriculoterapia
• Técnicas de psicoterapia
• Las constelaciones familiares (forma de terapia grupal de trauma)
• El reiki o “toque terapéutico”
• La aromaterapia
• La kinesiología
• La musicoterapia
• Las flores de Bach (tratamiento con esencias naturales)
• Entre muchas otras…

¿Qué efectos tienen estas terapias naturales?

Como es bien sabido, entre más saludable se encuentre su cuerpo, mayores serán las probabilidades conseguir un embarazo. Estas terapias buscan reequilibrar posibles desequilibrios que puedan existir en el cuerpo debido a los agobios y el ajetreo del día a día. Por ejemplo, mantener niveles reducidos de estrés, llevar una dieta más equilibrada y tener un mejor reposo, son cosas en la que se puede trabajar a diario y que seguramente tendrán un impacto en su fertilidad. No está de más intentarlo, nada pierde con probar y por el contrario le estará regalando a su cuerpo una mejor salud general. 

Así pues, la medicina alternativa y las terapias naturales le benefician de la siguiente forma:

• Equilibra su sistema hormonal (en hombres y mujeres) para favorecer el correcto funcionamiento de su aparato reproductor.
• En la mujer contribuye a mejorar la calidad de los óvulos y en el hombre mejora la morfología y motilidad de los espermatozoides, además de aumentar su conteo de espermatozoides.
• Reduce los síntomas de la endometriosis
• Aumenta la libido sexual
• Ayuda en la regulación del ciclo menstrual, algo muy útil para calcular las fechas de fertilidad y para lidiar con los síntomas del síndrome de ovario poliquístico. 
• Mejora las condiciones generales del útero, particularmente del endometrio, el cuál es el lugar donde la implantación se lleva a cabo.
• Reduce el estrés y la ansiedad que se producen con los problemas de infertilidad y los tratamientos de reproducción asistida.

Aun así, tenga en cuenta que ninguna de estas técnicas constituye un sustituto o un reemplazo a la medicina convencional, más bien al contrario, puede servir de etapa preliminar antes de recurrir a la ayuda profesional, o puede ser un complemento a la hora de implicarse en tratamientos de tipo médico. Si tiene alguna duda, consulte a su médico sobre la posibilidad de someterse a alguno de estos tratamientos naturales y/o alternativos.

Todos estos métodos son formas estupendas de cuidar y entender su cuerpo de una forma muy diferente a la que usted está probablemente acostumbrado. Son útiles para mejorar no solo su salud reproductiva sino su bienestar general y con ninguno o muy pocos efectos secundarios.